viernes, 3 de junio de 2011

Chútala con la chueca!

Aquella tarde burlaba como loco, se quitaba a cualquier contrario, gambeteo a sus propios compañeros y hasta al árbitro, era el partido deseado por cualquier jugador, dio pases para gol, hizo un hat trick y sus familiares y amigos coreaban su nombre que retumbaba en las laminas que hacen sombra en los campos empolvados de aquella colonia a las orillas de la ciudad.

Hasta que se le levanto y apoyo con su pierna izquierda, aquella que estaba rota, sintió un escalofrío en los huesos como cuando se muerde una paleta de hielo, volteo y vio un par de muletas recargadas a la pared, respiró tomó aire y se volvió a recostar rogando pronto estar bien y poder volver a chutar un balón.

Vamos a volver ♬