Pero mientras escuchaba mi nombre y saludaba a los presentes en la mesa de honor, por mi mente pasaron miles de cosas, recuerdos, anécdotas, tristezas, alegrías, triunfos, fracasos, etc. me fue muy difícil comenzar una nueva etapa en mi vida pero poco a poco me fui acoplando al nuevo mundo, si, para mí fue un mundo nuevo con apenas 17 años me convertía en un chico universitario el cual quería comerse a su mundo de una sola mordida pero no, un poco después llego un gran amor a mi vida, Fernanda hizo que me volviera más responsable, tuve que trabajar para sacar adelante a mi familia, mi escuela y mi hogar, fue difícil y a punto estuve de abandonar, de tirar la toalla, de colgar los tenis, sinceramente no podía con toda la carga pero mi familia siempre estuvo conmigo y gracias a ellos pudimos terminar con esta etapa.
Aun recuerdo aquellos días eternos, de 5 de la mañana a 12 de la noche para poder llegar temprano a mi clase de 7 y posteriormente cumplir con mis 8 horas de trabajo, no veía el fin, no notaba el avance, no podía más, pero dentro de mi había algo que me empujaba y hacia que continuara, tal vez fuerza de voluntad ó ese pequeño amor que me impulsaba a seguir.
Gracias a todos aquellos que me apoyaron y a quienes siempre creyeron en mi, este logro es de todos, esto es apenas el comienzo, NADIE NOS REGALO NADA, no importa cuantas veces caigas sino cuantas veces te levantes, el éxito es el camino no la meta.
NADIE NOS REGALO NADA!!!
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